Esto que te voy a contar no es una historia real, pero podría serlo.
Mira.
Igual estas frases que te voy a poner aquí han salido de tu boca en algún momento:
«Quiero que mi perro deje de tirar de la correa».
«Necesito que mi perro deje de ladrarle a todo».
«Mi perro ladra, pero ladra todo el rato».
«Quiero que mi perro deje de saltarle encima a las visitas».
Bien.
Muy a menudo no.
Casi siempre no.
Siempre.
Siempre ponemos el foco en lo que nuestro perro hace mal.
Solo vemos de él las cosas que no nos gustan.
Como está pasando con Messi. Como ahora casi todo le sale mal allá en París, lo ponen a caldo.
Bueno.
Pues creemos que esos malos comportamientos nuestro perro los hace todo el rato, pero es falso.
Siempre hay momentos del día en los que nos da la oportunidad de intervenir y reforzar comportamientos alternativos buenos.
Si
em
pre.
Lo que pasa es que esos buenos comportamientos o bien no los vemos o no queremos verlos.
Mira. Un reto no solicitado te lanzo:
Concéntrate en reforzar con un premio de comida los momentos que tu perro vaya cerca de ti paseando con la correa floja. Los hay.
Estate atento y pendiente de ese momento en el que tu perro está en silencio y deja de ladrar para reforzar con un premio de comida ese silencio. Lo hay.
Refuerza a tu perro con comida por estar en el suelo con sus cuatro patas, no sentado, en diferentes momentos del día. Para él es sencillo y lo puedes conseguir entrenando habilidades u otras cosas. La cuestión es que también hay momentos en los que tu perro está con las patas en el suelo y no saltando. Los hay.
El basarse en la ciencia y el refuerzo es lo que tiene.
Te concentras más en comportamientos buenos que tu perro pueda hacer y que a la larga eliminan el malo sin proponértelo.
Un enfoque inteligente y también amable para el perro.
Como ves, está en tu mano poner el foco en lo bueno en vez de en lo malo.
Si quieres profundizar, en este audio puedes:
